miércoles, 20 de noviembre de 2013

Es la hora de salir

Mis padres quieren llevarme unos días a Suiza, en coche.
La verdad es que la idea me resulta atractiva, viajar en coche por España, pasan Andorra y cruzar Francia tiene que ser bonito, pero aun así tengo reservas.
No es la hora, aún, de ver mundo.
Cuando sea el momento cogeré un coche, buena música y dinero para comprar tabaco en Andorra y gasolina en Luxemburgo, ropa limpia y una tienda de campaña para hacer noche en la bretaña francesa y un abrigo grueso para pasear por Berlín bien acompañado.
No es el momento de salir y adelantarme lo que tengo claro, veré más adelante.

domingo, 15 de septiembre de 2013

Un nuevo curso.

Segundo de bachillerato de nuevo...
Un primer trabajo...
Estoy deseoso de empezar, acabar mis estudios por el momento, conseguir mantenerme a mi mismo y disfrutar lo máximo posible de mi tiempo libre.
Será un año duro, de eso no tengo dudas, pero podré con ello y lo disfrutaré lo máximo posible.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Crónica de un año.

Me paro a pensar y reflexiono sobre mi historia reciente.
A inicios del verano del año pasado yo aún no lo sabía, pero sería cuando empezaría a vivir.
Mi existencia era bastante pobre, pasaba sin pena ni gloria, nada destacable, y como si de una broma se tratase, fue como si la vida tuviese prisa por recuperar el tiempo perdido.
Desde luego no todo fue bueno, aunque tampoco todo fue malo.
Me enamoré, me equivoqué, hice amistades y perdí otras tantas, conocí a gente que pasaría más tarde sin pena ni gloria por mi vida y a otras pocas personas que marcarían un antes y un después en ella.
Fue un gran verano, pero lo mejor fue que se acabara.
Un otoño melancólico y triste para finalizarlo, apoyo en los hombros de mis amigos, y como quien no quiere la cosa la historia se repitió: me volví a enamorar.
No fue como en las películas, no fue un flechazo ni algo premeditado, simplemente pasó, una coincidencia, como para compensar la pasada estación.
Supongo que, por eso, ahora soy feliz.

Un año triste en estudios, abundante en vida.

lunes, 2 de septiembre de 2013

"Truji eres un borde."

Estoy harto de escucharlo.
Mis mejores amigos, mis mejores amigas, mi familia, mi pareja, gente que apenas conozco...
Estoy cansado de ello, no comprenden la manera de pensar que me lleva a hablar o actuar como hablo o actúo.
La gente se calla, no dice que algo no le gusta, no defiende sus ideas, no deja ver que algo le incomoda. Le choca que alguien lo haga.
Eso no me vale, nunca he aceptado algo sin rechistar y nunca dejaré de defender mis ideas.
Porque las mías son mías y por ello están en lo cierto, mucho tenemos que hablar para que cambie de opinión.
La humanidad está siempre reprimida, enseñada desde que nace a ser sumisa, a no dejar ver sus ideas, a aceptar lo que les viene de arriba usando siempre el mismo motivo: el respeto.
Eso no me sirve, por esa cultura la gente autenticamente libre se ve tachada como asociales, bordes o repelentes.
El día que la gente exprese sus ideas más allá que en una discusión en la mesa de la comida familiar o la terraza del bar se hablará de verdad de libertad de expresión.
Si no quieres o no aguantas algo, no lo aceptes.

sábado, 31 de agosto de 2013

Una historia de guerra...

... y pocas de paz.

En las clases de historia nos muestran fragmentos de libros y de textos para comprender mejor el temario.
La mayoría de esos fragmentos fueron el anuncio de sanguinarias guerras, textos sacados de libros o discursos a principios del siglo XX, causantes de decenas de millones de muertos, o tratados anteriores en los que se decidía a qué país pertenecía cada persona sin tener en cuenta su determinación, que mas tarde también desembocaría en guerras y muertes.
Ejemplos hay muchos y confirman lo que dije ayer: las palabras son un arma, el arma más letal del mundo.
Sin embargo, un arma puede usarse de herramienta.
Podemos usar un hacha para talar un árbol, un rifle para cazar un ciervo y comer, una bayoneta como cuchillo en la cocina y las bombas para la creación de carreteras y túneles.
La independencia de la India de Gran Bretaña, la conquista de los derechos civiles de los negros en Sudamérica o la lucha por la igualdad de razas en EEUU son los ejemplos que me vienen a la mente.

Pienso en todo el mal que hacen las palabras y en el poco bien que hacen en comparación, y pienso si no nos iría mejor a todos si no tuviésemos lengua.

viernes, 30 de agosto de 2013

Un inicio complicado...

Escribir es fácil.
Cualquier muerto de hambre con un poco de cabeza puede coger una hoja en blanco, escribir sus ideas y convencer a todo el mundo de que está en lo cierto, la historia está llena de ejemplos que me dan la razón. La palabra escrita es una arma al servicio de la mente humana, gracias a ella se forma el mundo, sin la lengua escrita no somos nada.
Lo difícil no es escribir y que quede bien, lo difícil es siempre lo mismo: saber cómo y cuando empezar y cómo y cuando terminar una historia, sea del tipo que sea.
Este blog es MI blog, es un post-it, un folio o un cuaderno a mi servicio, donde puedo empuñar el arma más poderosa que sé usar: la palabra.
No tiene una temática definida, no tendrá un ritmo de publicación constante.
Es mi diario, mi mapa para no perderme dentro de mi mismo, mi válvula de escape, mi váter para desahogarme y mi cama para descansar.

Porque a veces es necesario.